Vietnam
es uno de los países asiáticos más importantes del mundo, y la ciudad de Ho Chi
Minh una de las poblaciones más significativas del país oriental. De su arquitectura
podemos decir que combina a la perfección pasado, presente y futuro, lo que conlleva
que en esta magnífica urbe se entremezclen la tradición vietnamita con la modernidad
de occidente.
En
materia de construcción podremos encontrar tanto templos budistas como edificios
coloniales coexistiendo con complejos más contemporáneos, formando una armonía mixta
deliciosa para los ojos del espectador.
Ho
Chi Minh se impone con autoridad como un gran ejemplo de materia arquitectónica
fresca, y muestra de ello es una torre que sobresale de todas las demás, el edificio
más alto en el centro del área metropolitana. Estoy hablando de la torre financiera
Bitexco y lo impresionante del asunto es que se construyó en un periodo de tan sólo
tres años ―de 2007 a 2010― y en su momento fue considerado el rascacielos más alto
del país, pero cabe aclarar que no se le reconoce por la magnitud de sus
dimensiones, sino por sus acabados y formas, los cuales asemejan una flor de loto
que simboliza la prosperidad y el dinamismo de esa metrópoli.
Las
instalaciones de tal desarrollo incluyen 16 ascensores que, según dicen, son capaces
de alcanzar cualquier nivel en menos de 45 segundos, notable peculiaridad si partimos
del hecho de que el edificio tiene 50 pisos en una altura total de 262 metros. Además,
cuenta con un helipuerto, un mirador en el piso 49 el cual posee una vista privilegiada
de sus alrededores y un restaurante exclusivo que ocupa las plantas 47 y 48.
El
edifico provee a sus usuarios un centro de convenciones, un centro comercial que
abarca los pisos inferiores y, por supuesto, oficinas, además de 3 niveles subterráneos
que son usados como bodegas, por lo que puedo afirmar que este es un edificio futurista,
de vanguardia y un modelo a seguir de lo que representa la arquitectura moderna.
Como
dato curioso, durante los grandes festejos que se llevan a cabo en Ho Chi Minh,
las luces láser reflejadas en la estructura de cristal que rodea el edificio cambian
de color para que la torre Bitexco luzca como una hermosa flor de loto durante
toda la noche. Esa impresionante vista queda guardada en la mente de los turistas
que visitan el espacio arquitectónico, símbolo del desarrollo urbano vietnamita.
0 comentarios:
Publicar un comentario